sábado, 15 de agosto de 2015
Publicado en www.runrun.es el 11 de agosto de 2015
http://runrun.es/opinion/217839/es-solo-el-esequibo-lo-que-debe-discutirse-por-maria-teresa-belandria.html
El
tema de la reclamación del Esequibo y la defensa de los intereses
permanentes en el territorio y la fachada atlántica, ha tomado fuerza y
resonancia en la opinión pública. Quienes por años hemos defendido
nuestra integridad territorial desde la academia celebramos que el
estado se ocupe, aunque tarde y con torpeza de un asunto de vital
importancia para la nación. Consultar a los expertos nacionales con
amplia experiencia, es un avance, para salvar el escollo que supone una
comunidad internacional favorable a Guyana y reencauzar la controversia
al ámbito bilateral conforme a las previsiones del Acuerdo de Ginebra de
1966. Guyana, diariamente suma aliados, ya no solo el de Caricom y
Cuba, que históricamente le han secundado, también la Commowealth y un
importante número de países pertenecientes a los No Alineados. A nuestro
país le corresponde, explicar adecuada y seriamente nuestros legítimos
derechos y promover al mismo tiempo, que Guyana se siente otra vez a la
mesa de negociación.
Pero lejos de la diatriba que hoy ocupa titulares y portales en los
medios oficiales, hay dos procesos de negociación y consecuentemente de
delimitación de nuestro territorio, completamente abandonados, olvidados
y silenciados. Por una parte, el diferendo de áreas marinas y
submarinas al norte de Castilletes con la República de Colombia y por la
otra, la delimitación con varias Islas del Caribe oriental, que se han
negado sistemáticamente a reconocer la soberanía de Venezuela sobre Isla
de Aves, a cuestionar el carácter de Isla y a desconocer el tratado de
límites de nuestro país con Estados Unidos de Norteamérica por (Puerto
Rico).
En el caso con Colombia, es mandatorio recordar que el 23 de marzo de
2009, el Comisionado Presidencial Dr. Francisco Javier Nieves-Croes,
denunció mediante “Memorando de opinión disidente sobre la propuesta
Gómez-Rondón de 2007 sobre la delimitación de áreas marinas y submarinas
en el Golfo de Venezuela”http://images.eluniversal.com//2009/04/13/cartagolfo.pdf la
existencia de un pre-acuerdo de delimitación al que había llegado el
Presidente Hugo Chávez con su homologo Álvaro Uribe Vélez con el
conocimiento reservado solo a una parte de los Comisionados y que
constituía un retroceso en la posición oficial adoptada por la CONEG,
que se fundamenta en la prolongación de la frontera terrestre de
Venezuela.
Este documento fue desmentido por la Cancillería de entonces, y por el
propio Presidente Chávez, y además originó la remoción de todos los
Comisionados, incluyendo al Profesor Nieves-Croes. Desde esa fecha
(2009) hasta hoy, se desconoce el trabajo de los Comisionados, los
avances, las discusiones. De lo que si tenemos certeza es que la negada
Hipótesis existió.
El pasado 27 de mayo de 2015, Venezuela dictó el Decreto 1787 que creó y
activó las Zonas Operativas de Defensa Integral Marítima e Insular
(ZODIMAIN), que fue anulado y modificado por el Decreto N°1859 del 06 de
julio de 2015. Este instrumento de empleo militar, fue interpretado por
Colombia, como una delimitación unilateral de las áreas marinas y
submarinas y en consecuencia emitió el 17 de junio de 2015 una Nota
formal de Protesta contra el mismo. En la nota, describen la “delimitación de las aguas del Golfo de Coquivacoa”
para referirse a nuestro Golfo de Venezuela, que no está en discusión,
pero a la vez piden devolver la controversia al marco de la CONEG.
En este contexto declaró el ex presidente Uribe el 21 de junio de 2015 “la
Comisión Binacional (refiriéndose a la CONEG) encontró un preacuerdo al
diferendo. La delegación venezolana expresó a nuestros delegados, que
ese preacuerdo tenía el visto bueno del Presidente Hugo Chávez
(q.e.p.d.).” Detalló que en una reunión con Chávez en el departamento
colombiano de La Guajira (norte) “le entregué el bosquejo que recibí del
doctor Pedro Gómez Barrero (integrante de la Comisión Binacional). El
Presidente lo puso en su bolsillo. Guardó silencio. Nunca dijo algo“.http://www.eluniversal.com/nacional-y-politica/150621/uribe-maduro-tapa-crisis-de-venezuela-con-decreto-de-limites-maritimos .
Lo dicho por el senador Uribe, confirma que si hubo negociaciones entre
un grupo de los comisionados colombianos y venezolanos, a espaldas del
resto y de que se llegó un pre-acuerdo que de no haber sido denunciado,
pudo causar grave perjuicio a la reclamación venezolana. Justo es
entonces reivindicar la advertencia que realizó valientemente el
estimado profesor Francisco Javier Nieves-Croes.
El gobierno ha decidido crear la Comisión Presidencial de Estado para la
Garantía de la Integridad Territorial y Asuntos Limítrofes, y en ella
pretenden agruparse todos los asuntos de delimitación pendientes. Craso
error. Cada controversia requiere de especialistas diferentes y su
tratamiento debe atender a la especificidad con cada país. Lo conducente
para garantizar adecuadamente el interés nacional, es nombrar los
Comisionados en la CONEG, rescatar el acervo normativo y del proceso de
negociación que cuenta con más de 25 años de experticia y separarlo de
la exposición mediática de la reclamación del Esequibo. Se impone la
sensatez y el conocimiento, más allá de la diatriba electoral y
partidista.
Por último, la opacidad o inexistencia de procesos de negociación con el
Caribe son alarmantes. No se evidencia el interés en reafirmar nuestros
derechos soberanos en Isla de Aves, frente a las pretensiones de
desconocimiento que Saba y San Eustaquio; Guadalupe y Martinica cursan
ante la ONU desde 2001. El último tratado de delimitación se suscribió
en 1991 con Trinidad y Tobago, desde esa fecha al presente, el Caribe
solo ha servido para ganar adeptos en Petrocaribe y sumar votos a través
del CARICOM tanto en la OEA como en ONU. Las mas reciente gira del
Vicepresidente no da muestras de haber impulsado este tema que al igual
que con Colombia, sigue pendiente.
La integridad territorial de nuestra nación no es un asunto de
propaganda o discursos altisonantes. Tampoco de privilegiar un tema-El
Esequibo- porque hay una empresa petrolera que sirve para distraer al
público de galería de lo esencial. El territorio es uno, su defensa,
tarea de todos sin distingos. Retomar la senda de la solución pacífica
de las controversias conforme al artículo 33 de la Carta de la ONU es lo
sensato, lo apropiado y lo conducente. Probablemente la Asamblea
General de la ONU a celebrarse en septiembre sirva de escenario para el
encuentro con Guyana y preservar nuestros derechos.
En diplomacia, se actúa con prudencia, sin estridencias, con pocas
declaraciones y si mucho trabajo de negociación lejos del escrutinio
público que a veces lejos de ayudar, entorpece. Anunciar aliados
coyunturales y que luego éstos desmientan a los voceros, nos coloca en
posiciones vulnerables de cara a lo que será un largo, lento y
complicado proceso de negociación. Por ello, más allá del fervor
nacionalista que estos temas despiertan debemos actuar con firmeza,
templanza, prudencia y valor. Venezuela es primero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios que aparecen en este sitio web son responsabilidad de sus autores y no de Territorio Venezolano, Nuestro Legado Eterno.